miércoles, 20 de junio de 2007

Orgullosa

Ella

De lo que eres y de como actúas. Aunque me tienes en ascuas con ese asunto que traes entre manos. Tanta confidencialidad me activa demasiado la curiosidad jeje. Pero bueno, hasta que no me puedas decir nada, no me digas nada, que ya sabes cuanto me gusta saber. Me alegro por tí, y me gustaría estar tan bien y tan ilusionada como lo estás ahora. Pero imagino que son días. Y ya sabes que las mujeres tienen varios días malos, sin saber por qué. Lo bueno es que me predominan los días geniales. Como aquel del outlet. Tienes razón, conquistamos toda Europa, pero aún nos falta mucho mundo. Por lo pronto, sigamos con Inglaterra (que aunque está dentro de Europa, no se ha apuntado al carro del euro -son más listos, je-), a ver si puedo cuadrar fechas y te saco de este país donde lo que impera es el calor infernal del verano. Y fíjate, a pesar de eso, sigo queriendo abrazarte al dormir. Que por cierto... hace tiempo ya...

lunes, 18 de junio de 2007

Expresivos

Él

Así son mis ojos según tú. Supongo que es cuando estoy a gusto. Hoy no lo estoy mucho porque tengo prisa por solucionar situaciones. No voy a permitir que otros lo hagan. Lo sabes. Esta semana va a ser decisivo porque lo quiero decidir yo, no los demás. Quiero cambiar de aires. No me veo un verano caluroso recorriendo kilómetros para desear avanzar más en lo que deseo.
Me pido paciencia y centrarme en otras cosas. Para colmo mi jefe me ha dicho que he engordado, lo que me cabrea más. Me siento como una mujer ante la operación bikini. Te reconozco mi coquetería. A partir de hoy se acabaron muchos alimentos que inconscientemente seguro he tomado.
Y tú engordando y encantada de la vida para que te entre mucha ropa este verano. De momento te has despachado a lo grande en el Outlet que encontramos en aquel pueblo rodeado de valles. Qué imaginario el de aquel día. Tú y yo conquistando ciudades para crear un imperio. Ficticio, pero ambos metidos en el papel. Lo mismo hasta nos hemos equivocado de profesión y deberíamos dedicarnos a la política.
Mejor en sueños.

jueves, 7 de junio de 2007

Descanso

Ella

Estoy trabajando sin descanso para ver si podemos salir de aquí prontito y llevarte a cenar por la playa. Fíjate si no paro que casi no fumo (y eso sé que te gusta porque me hace bien). La verdad es que tengo bastantes ganas de perderme de esta ciudad aunque sólo sea por un día contigo, que se está a gusto y se airean las ideas. Está siendo una semana complicada, por el cansancio acumulado y por el trabajo agotador. Y por la cabeza, que no para ni un segundo de trabajar, en todos los sentidos. Tal vez por eso duerma poco, porque tengo poco tiempo para pensar en mí y, cuando no trabajo, procuro aprovecharlo. Me viene bien, me aclara bastante.
Por lo pronto mañana disfrutaremos de un día de playa, con palas incluidas y con comida como colofón, antes de que te vayas a trabajar. Yo mañana descanso, que creo que me lo merezco. Y a ver si nos sale la escapada del finde, aunque si no es así, siempre hay cosas que hacer cerca de casa, que para disfrutar no hay que irse 500 kilómetros arriba.
Niño, voy a ponerme a currar a ver si termino pronto, que tengo ganas de darte un abrazo, un beso, y una noche estupenda.

domingo, 3 de junio de 2007

Sin cobertura

Él

Pero no estás sola. Has respetado que saliera este fin de semana a no sé dónde. Lo peor ha sido el agobio de no encontrar un mísero teléfono para contactar contigo. Menos mal que estamos en el Siglo XXI, pero pese a tan tecnológico milenio no he conseguido buscar una vía para decirte que "estoy bien".
Solo ha sido un día pensando en qué harás. Lo sé de sobra, pero me afligue verte mal y agobiada por el trabajo. No te lo mereces. Incluso precipitadamente pienso si deberías seguir. Qué tontería....
Estás bien. Son unos de esos días en los que te putean. Pero ya sabes que merece la pena. Es más, quiero que durante la semana pienses en el Domingo porque vamos a escaparnos de nuevo con o sin licencia.
No sé hasta cuando podremos escaparnos porque cada vez ando más liado. Lo sabes. No hablo de trabajo, sino de sentimientos.
Uno noche me dijiste que yo estaba en una situación cómoda, y te equivocas de lleno. Tengo mucho sufrimiento por dentro. En el poco tiempo que nos conocemos quizá no lo veas, y estás en todo el derecho de no creerme si quieres. No sé hasta qué punto uno es lo que hace. Solo espero que jamás me taches de mala persona y de egoista por no mirar por los sentimientos de los demás. Perdona si me porto demasiado bien contigo. Lo digo con ego, es lo que creo que estoy haciendo hasta ahora. Es más, tenía tantas ganas de volver porque sé que estáis hasta arriba de trabajo.
Soy débil. Lo sabes. Tampoco soporto ver a nadie mal, y quizá ese sea mi cruz.
Descansa, encanto

sábado, 2 de junio de 2007

Cansada

Ella

Son las dos de la mañana y sigo trabajando. A veces pienso que no tengo vida para más que el trabajo, al menos es lo que extraigo de mis conversaciones con la gente. Pero bueno, es lo que hay, no se puede pedir peras a un olmo. Y si sólo trabajas, es lo que pasa. Pero bueno, también te digo que estoy trabajando con ron, Es culpa del compañero, lo conoces bien. También canta Sabina de fondo y dice que "peor para el sol, que se mete a las siete en la cuna del mar a roncar, mientras un servidor le levanta la falda a la luna". Quizás no sea tu estilo, pero es una gran frase.
Hoy hemos dormido bien, al menos yo he dormido bien.... sabes que me encanta abrazarte, es algo que no he podido hacer nunca con nadie porque siempre suelo agobiarme de calor. Pero aunque tú siempre estés muy caliente (y esto no es nada pornográfico, como dirías tú) no me molesta. En fin, echémosle la culpa a los tres rones (o así) que llevo.
Espero que hoy hayas pasado buena noche, y gracias por la ayuda de esta tarde, otra vez. Sé feliz, pequeñajo, día a día, y cada día un poco más.

jueves, 31 de mayo de 2007

Sin tiempo

Él

Y te quejas porque el que me queda solo te lo dedico a tí. Echas de menos estas esporádicas líneas. Ya te lo dije, que esta relación iba a ser sin exigencias. Pero esta vez te pones traviesa y me pides que haga memoria de estos días sin escribir.
Sabes que han sido geniales. Esas noches en la playa me abruman. Tranquilidad que ha tornado muchos momentos de dolor de cabeza por culpa de ese vino al que no hemos enganchado. Risas al recordar a un francés que aproechó mi ausencia para pretenderte.
Y yo me río. Me encanta.
Dime algún mal momento que hayamos vivido este tiempo sin escribir. Porque no lo encuentro: la oficina, la playa, el casino, nuestro refugio, los paseos, las comidas frente al mar. Me gustan tantas cosas que me daría pena perderlas. Desde luego yo no quiero que sea así. Eres mi compañera. Otros directamente dicen algo más fuerte que hasta da miedo plasmarlo en esta pantalla.
El tiempo lo dirá por los dos. No tengo prisa

miércoles, 23 de mayo de 2007

Incertidumbre

Ella

Te lo dije ayer. Estoy en un momento de incertidumbre que no sé cuanto tiempo voy a lograr aguantar. También te dije que ahora mismo me encuentro bien conmigo misma, y eso es impagable. Creo estar haciendo las cosas como debería hacerlas, pero hay cosas que quiero hacer que no puedo. Y soy muy impulsiva, y no sé cuanto tiempo podré controlar mis impulsos. Soy incontrolable, incluso para mí misma. Creo que eso lo sabes... Al mismo tiempo estoy tranquila. Por eso ahora mismo, veo mi situación un tanto extraña... no sé en qué lugar me encuentro y, a veces, tampoco sé como debería actuar. Incertidumbre todo. Y de momento no tengo ansiedad. En el momento en que tenga ansiedad cambiarán las cosas porque es la sensación que peor llevo y que menos sé soportar. Aunque creo que esto te lo dejé claro ayer.
Yo sólo quiero que tú estés bien, que seas feliz, y ahora mismo no te veo feliz. Tú mismo, tú sabrás como debes llevar tu vida, pero vamos... la felicidad me parece algo que no se le puede negar a una persona, ni siquiera uno mismo. Sé egoista, te repito. Y tómate el tiempo que necesites. Aunque quizás yo también necesite, en breve, mi tiempo. Hacemos las cosas de manera diferente, ni mejor ni peor, pero cada uno hace estas cosas de una manera. Y ya sabes que hasta que pueda controlarme no habrá problema. Pero en el momento en que pierda el control, entonces necesitaré mi tiempo, porque siempre soñé con una historia un tanto ñoña, o al menos que se le asemeje...

martes, 22 de mayo de 2007

Ansiedad

Él

Acaba de salir del trabajo y no tengo ganas de nada en estos momentos. No estoy bien en casa, el trabajo empieza a hastiarme, tengo prisa por que termine esta semana y tomar la decisión para marcharme lejos de mi familia. No sé a dónde, ni cómo ni con quién. He aguantado mucho tiempo.
Encima no sé cómo voy a salir de ese agujero en el que me he vueltoa vivir. Enpiezo a no tener la ilusión por muchas cosas. Me quiere animar, pero no sé cómo lo va a conseguir. Veo tus fotos conmigo y empiezo a sentirme una miserable, cobarde, arrepentido incluso. Me duele mucho después de que anoche le diera una oportunidad y al poco tiempo discutiera por cosas a las que no doy importancia.
No soy feliz ahora mismo. Y tú sábes cómo lo soy. Porque me has visto, y no es tan difícil darse cuenta de que me falta el valor de hacer muchas cosas por no hacerle daño a las personas. Tienes razón, soy demasiado bueno. Ahora no sé cómo evaluar las consecuencias. Tengo ansiedad. Te escribo desde la calle. Con la inminente necesidad de gritarte que estoy harto de muchas cosas. Grito.

Jornadas de reflexión

Ella


Están siendo días duros. Parece que no hay dos sin tres, ni tres sin cuatro. Pero siempre digo que lo que no te mata te hace más fuerte. Qué remedio. Ahora tú estás mal, y yo también estoy mal, pero yo lo voy llevando, y a tí te agobia bastante toda esta situación. Te dije ayer que cada uno debe salir de los hoyos en los que se mete, pues por muchas manos que te intenten rescatar, eres tú quien debe poner los pies contra la pared para empezar a subir. Y para eso hay que echarle un par. Y tú tienes ese par, no entiendo por qué no lo sacas. Deja de preocuparte por el daño que puedas hacerle al resto de personas (y aquí me incluyo yo) y empieza a mirar por tí, por tus sonrisas y por tu bienestar. Sé egoista. No te mereces muchas cosas de las que te pasan, y eso me duele, porque eres tú quien las permite. No debes permitir que te maneje nadie, y menos siendo como eres. En cuanto a mí... hace tiempo que dije de quitarme la coraza y, si me tienen que hacer daño, pues bienvenido sea. Repito, lo que no te mata te hace más fuerte. Pero sí he de decirte que te echo de menos, y que no sé muy bien en que punto estamos. Ni en el que vamos a estar, aunque esto último es lo que menos me preocupa. Ojalá llegues a averiguar cual es tu camino, y cuales son tus prioridades. Ojalá, pequeñajo, ojalá seas feliz... sea cual sea la decisión que tomes.

lunes, 21 de mayo de 2007

Rojo

Él

Tuvimos la suerte de que te dieran el sábado libre. No tardamos en salir el viernes de madrugada para llegar hasta la casa que tienes en esa playa tranquila, palabra que muchas veces me pides que no repita. Ya sabes que siempre lo digo porque me gusta eso: tu tranquilidad. Lo mereces.
No me puedo quejar de estrés porque mi jornada laboral no es comparable a la tuya. Cada vez que te visitio a última hora me da miedo decirte cualquier cosa, ni tan siquiera la más cariñosa. Me impones mucho respeto.
Suerte que este fin de semana solo nos ha tocado beber daikiris, descansar, comer, tomar el sol y ponerte en forma jugando a las palas. Porque tu pasado deportista quiero desterrar de esa vida un tanto sedentaria que respeto, pero no comparto. No lo consideres como una idealización mía, sino más bien mirar por tu salud. Con ese cuerpo de raspa, fino y que con una sola mano incluso creo a veces poder rodear. Menos que un peso pluma.
Como esos recuerdos a la ligera en los que me contabas tu infancia junto aquella montaña y esas olas que casi te entierran si no llega a ser por la prudencia de tu padre que te rescató. Te escucho, y me queda mucho por hacerlo.
Eres como esa pequeña que evocabas caminando por la orilla del mar. Aquella niña que dos días seguidos se apoya en mi hombro para dormir. Un lujo. Y yo castigándote con mis conversaciones de noctámbulo. Dices que son buenas. Que te pido que estés bien, incluso algún beso incosciente pero apasionado ha acabado en tus labios. ¿Seguro que solo eso?. Con el calor de tu cuerpo desnudo pegado al mío puede pasar cualquier cosa. Es normal. Me cuidas, y eso tiene sus consecuencias.
Has estado con molestias estos días. Yo preocupado por tus dolores, pero imposibloe encontrar la manera de borrarlos. Ha sido lo de menos. Gracias por ser así. No te pierdas. Quiero tener cerca. Pase lo que pase...

jueves, 17 de mayo de 2007

El sábado

Ella

Acabo de subir de comer, hoy toca un día duro, como tantos y tantos días de la semana. Aún no he comentado en el trabajoque quiero pillarme el sábado y espero que me lo den, sino me voy a consumir. Menudos días...
Tengo muchas ganas de relajarme en la playa, de que me prepares esos cócteles que dices, de abrazarme a ti como una raspa para dormir sin preocupaciones, desnudos, y disfrutándonos lenta o rápidamente. Tienes ganas, te lo noto. Pero sabes que también me gusta dejarnos unos días libres. Para reforzarme y darme al cien por cien. Porque estoy muy cansada de todo el día, aunque también te tengo unas ganas locas. Tenlo claro. Esta noche tal vez; podemos ir primero al cine, si acabamos pronto (cosa que decimos siempre) y luego irnos juntos, a nuestro hotel, o a donde nos dejen. Aunque me den el sábado libre, esta noche también te tengo ganas. Como todas las noches aunque tú no estés en mi cama.
Y al margen de esto, también sigo disfrutando como una enana con nuestros momentos... me río, hablamos, nos tranquilizamos. Estoy bien, y sólo espero que tú también lo estés. Ojalá me den este sábado... lo pasaríamos de lujo, pequeñajo.

miércoles, 16 de mayo de 2007

Magullada

Él

Tengo ganas de que llegue la noche para ver qué me vas a hacer entre copas. No quiero preocupaciones. Hemos tenido un par de momentos de tensión innecesarios. No voy a recordarlos porque ya están zanjados y no me gusta perder el tiempo con cosas que están ya de sobra arregladas.
Te diré que a mi vuelta de la playa tuvimos una conversación salvaje y mojada. El House de fondo, compenetrados, anhelando tu cálido aliento.
Estos días te has quejado de que te duele todo el cuerpo. Me llamas animal, perverso. Y yo preocupado por el qué dirás a tus amigas cuando pregunten cómo me comporto en esos momentos. A veces las mujeres sois tan picaronas. Os juntáis unas cuantas y os recreais con el tamaño de uno u otro, que si este se mueve mal en la cama, que si la tiene pequeña, no se lava. La verdad, no os distinguis mucho de tantos hombres que conozco. A mí me gusta ser discreto y no dar pistas, como todos los negocios que llevo entre manos. No vaya a ser que le comente algo de nuestras conversaciones y les de por intentarlo contigo. Claro que eso no es algo que me moleste. Simplemente digo: "Hay que ser un atleta para tenerla satisfecha".
Eres muy dura. Tanto que zcabamos empapados de ese sudor sano del que tanto te hablo. Incluso nos quedamos durmiendo desnudos sobre mi toalla. Menos mal que despertamos. Menuda sorpresa se habría llevado la secretaria.
Anoche me enseñaste tus magulladuras. Insistes en llamarme animal. No me gusta que lo hagas. Tampoco me ofende. Solo espero que con este tiempo te des cuenta de que hago las cosas más allá del sexo, el placer, el desfogue, follar ........ llámalo como quieras menos hacer el amor. Deseo que el día del mañana te quedes con la sinceridad de haberte tratado bien.

domingo, 13 de mayo de 2007

Acción-reacción

Ella


Ha salido el sol de lleno en esta ciudad. Y te vas a la playa. Haces bien. Supongo que haría lo mismo si no tuviera que trabajar... quizás lo mismo no, pero sí me iría a la playa. Tú ya me entiendes. Aunque yo no lo entienda. A veces me da que pensar muchas, muchas cosas y, para que te voy a engañar, me siento en un segundo plano bastante tonto. A pesar de que me puedas decir que no me vas a hacer daño, y todas esas cosas que quedan tan bien en las palabras. Eso no depende de tí. El daño, las personas lo hacen sin querer. Lo sabes. Y qué quieres que te diga... ahora mismo ni tengo ganas, ni tengo tiempo para pasarlo mal, aunque sean dos días. Pequeñajo, entiéndeme, ponte en mi lugar un momento y dime qué papel pensarías tú que juegas si ves ciertas cosas. Creo que es evidente. Yo, por mi parte, ayer quedé con él. Y nos vino muy bien a los dos. Me reconoció muchas cosas que creía que no era capaz de reconocerme, nos reimos mucho, me apoyó bastante ahora pues, como sabes, entre el viernes y ayer estaba al borde del ataque. Pero no veo espejismos en el oasis por tener una noche muy chula. Yo, en mi caso, necesito este tiempo para mí, como creo que él lo necesita para él. Hay personas que, para crecer, necesitan estar solas, para endurecerse o madurarse, y ese es su caso. Ahora es su tiempo para ser mejor. Por eso no vamos a entrar en una tónica de quedar todos los días, ni todas las semanas, porque eso sería un error, al menos en mi situación y bajo mi punto de vista. A los dos nos parece demasiado extraño quedar todos los días y que nos parezca una simulación de nuestra relación. Yo no quiero eso, porque si no él no se va a olvidar, en cierto modo, de mí. Ni yo de él. A estas situaciones hay que darles correa, aunque tú creas lo contrario.
Yo ya sé que va a pasar, porque lo veo desde hace ya un tiempecillo. Ojalá estés feliz. Te mereces serlo, porque a veces de bueno te pasas. Y porque eres una gran persona y me has encantado por tu forma de ser. Y por tu forma de conversar. Y por tu forma de tranquilizarme. Pásalo bien en la playa... al menos uno de los dos tiene días libres para aprovecharlos.

jueves, 10 de mayo de 2007

En la oficina

Él

¿O creías que ibamos a tener una conversación solo en el "6"?. Ha sido una situación morbosa. Lo mejor de todo es que en el asiento acolchado de tu oficina podemos disfrutarnos cómodos. Inmersos en la madrugada, a oscuras, con la ventana abierta porque el calor ya nos hace sudar la piel. Sabes que me encanta replegarme en él, hace que la líbido se me dispare al ver brillar tu piel.
Qué locos. No sé si para esto tenemos que decirnos: "no tenemos verguenza". Simplemente hacemos lo que más nos gusta. ¿Qué se te pasa por la cabeza cada vez que ves aquel sillón negro?
También anoche hablamos de aquel momento de seriedad. Me preocupas. Mucho, y lo sabes. Ambos acabamos de salir de una relación y nos estamos ayudando a olvidar. Viviendo el día a día, sin saber qué pasará el día del mañana.
Que cada uno lo está haciendo a su manera, también es cierto.A mí me puede el ver a las personas sufrir. Y más si la has querido hasta dejarlo todo. Quedo con ella, no le he prometido nada. Todo sale, pero no sé hacia donde. Lo que me resultaría triste es perder su amistad porque simplemente no somos ya pareja. Le he dicho de darle una oportunidad si cambia lo que ha destruido tanto tiempo de relación.
Tú es normal que te enfadaras y por primera vez te pusieras tan seria como para pensar que te estoy utilizando, aunque me digas que soy la persona que más te estoy ayudando en estos momentos. Sabes que no me gusta que me aludas, me sonroja e incluso hasta me cuesta creerlo porque siempre te digo que es muy fácil hacer el bien con una persona tan increible como tú.
No me canso de decirlo ahora. Me encantas. Estoy compartiendo muy buenos momentos contigo. Olvida qué pasará el mañana.

martes, 8 de mayo de 2007

Tranquilidad

Ella

Esta mañana me han vuelto a reventar el sueño. Tú me dices que sabías que tarde o temprano pasaría. La verdad es que confié en que aguantaría mejor el tipo antes de quitarse la coraza. Pero bueno, eso no es lo que importa. Según Teresa de Calcuta, "La felicidad está en nosotros mismos. Somos felices porque amamos, no porque nos amen", y es una de las verdades mayores que he escuchado nunca. Así pienso yo, por eso tampoco me preocupa demasiado. Dejaré hacer al tiempo, ya que estas cosas no están en mi mano. Es injusto que, por no querer hacer daño a alguien, acabe sufriendo uno mismo. Hay que ser coherentes, ya tenemos una edad. Pero bueno... ya digo que no estoy preocupada. Al contrario, si he tenido algo de preocupación por un momento me la has quitado con tu llamada. Me ayudas, y no sabes de que manera. Me escuchas, me desahogo y luego me haces reir, aún con los ojos cerrados me haces reir a carcajadas. Te voy a comprar un mono. Porque tú lo vales. Pequeñajo, mil gracias (que no me cansaré de repetir) por ser como eres. Por hablarme como me hablas. Por la confianza que tienes en mí, esa que no te va a fallar. En fin, niño, que gusto da encontrarse gente así en una ciudad así... nos queda mucho tiempo que disfrutar.

lunes, 7 de mayo de 2007

Liberarme

Él

No quiero escribir estas líneas sobre la presión que padezco en casa por toda esta historia. Estoy harto de que dirigan mi vida a su antojo. Yo tengo el control de mi vida, y nadie me lo va a arrebatar porque las cosas no son como les gustaría a los demás.
Quiero ser feliz después de apartarme un tiempo de ella, pero me está costando más la presión familiar.
El viaje me ha ayudado mucho. Levantarme acompañado de tu cuerpo esbelto y cálido. Siempre abrazada a mí, sin tan siquiera sobresaltarte por mis conversaciones en sueño. Supongo que es porque tengo tanto que decir que ni estando dormido me puedo callar. Luego cada mañana hemos sabido compensarnos a base de fantasías, desenfreno, placer. No hemos parado de tener nuestra peculiar conversación. Me gustas más desnuda, y espero que también aprecies que si te compro ropa interior es porque también me gusta vestirte con estilo. Soy un maniático de la estética, y tú eres una obra de arte a la que me encanta adornar. Lo que más me sorprende es que en tan poco tiempo acierte.
Me encanta que seas espontánea. Hemos reído en los bares en abundancia, sin importarme mi disciplinari dieta. Nos ha tocado solucionar problemas ante esa mujer que necesitaba un buen polvo para ser amable. Me agradó la compañía de tus amigos. Pero lamento aquellos toques de atención a mi familia. Yo ilusionado mostrandome feliz, y con tan solo una regiña bajándome el ánimo.
Ante eso sé que me quedas tú porque me entiendes. Mis amigos también apoyan lo que estamos haciendo. Solo pido ahora que ella entienda lo mismo que él. Son personas distintas, pero la actitud es la misma: respeto. Si de verdad quiere que le de una oportunidad, tiene que tener confianza y respeto en mí. Por supuesto no va a suceder de golpe, por lo que solo me toca mantener la amistad aunque me cueste verla sufrir por lo que ella no puede conguir de mí.
Ahora no quiero exigencias de nada ni de nadie. No me debo. Tampoco conozco el destino ni quiero.Necesito vivir el día a día. Lo peor es que en casa tengo que convencer a todos para que me dejen en paz.
Difícil en una familia autoritaria. Y para autoridad, la tuya para hacerme sentirme bien. Mi compañera de gala.Aquella que sorpernde a todos.
Quiero escaparme contigo de nuevo.

domingo, 6 de mayo de 2007

En el '6'

Ella

A estas horas de la noche sólo sé decir que estoy cansada, reventada, pero con un placer increible de estos días. Escucho nuestras canciones del viaje y no miento si te digo que me excito, con mesura, pero aún así no puedo evitarlo. Me has dado tres días maravillosos donde hemos reído y hablado de mil cosas. También hemos conversado mucho, mucho, mucho... hemos amortizado, sin duda, el coste de la pensión. Y de qué manera, en la vida me las había visto en otra igual. Lo recuerdo ahora mismo y me entra un 'noseque' por el cuerpo. Pero todo bueno, sin duda. Además, no hemos dejado apenas nada por hacer, hasta los sitios más insospechados (piensa en la noche del viernes; lo que no nos pase a nosotros no le pasa a nadie) los hemos pisado. Hay sensatez, y eso es bueno. Y me encanta, como tantas y tantas cosas que nos unen. De este viaje hemos sacado varios lugares para visitar en futuros días libres. Pero, eso sí, con el móvil desconectado. No soporto verte mal por algo que no es culpa tuya. Y mucho menos por las explicaciones que se te piden o por las 'regañinas' que se te echan. Eres una persona fabulosa, y quien no lo quiera ver, sintiéndolo mucho, él/ella se lo pierde. Por eso estate tranquilo, el tiempo pone las cosas en su sitio. Por mi parte, reconozco que todo esto se me está haciendo más fácil. Sus mensajes de apoyo me ayudan a no sentirme mal, porque pienso que he obrado bien. Tú también, eso no lo dudes nunca, por mucho que te digan desde fuera. Te lo decía hoy, las cosas de pareja las saben esas dos personas... es muy fácil hablar sobre la vida de los demás, no cuesta un duro y encima entretiene. Pero también te he dicho que es normal que se preocupen. Por eso, take it easy, pequeñajo, que por la parte que me toca te apoyaré en todo lo que necesites, sin exigirte nada. Porque eso es lo bonito que tenemos entre los dos: no esperamos más del otro que lo que nos podamos dar. Y queremos hacernos felices, de la manera que sea. Por lo pronto, veo esa felicidad en tus sonrisas y en tus carcajadas (que también son las mías) y en tus ojos, sobre todo en tus ojos. Por eso me encuentro bien y no se me está haciendo difícil.
Que maravilla de días... que falta nos hacía a los dos. Y que gusto más grande, en todos los sentidos. Sólo te pido que sonrías, y algún que otro baile como el del sábado.
Chatín!!!

miércoles, 2 de mayo de 2007

2

Él

Ya no somos 4. A ambos nos ha costado dejar tanto tiempo de relación. Una historia que se ha repetido y he sufrido por doble partida. Porque no quiero que ella sufra, y ahora me marco solo coservar la amistad que de momento me ha negado porque no se imagina una vida por separado.
Es una gran persona. Increible, pero sus celos y su obsesión por controlar cada uno de mis movimientos ya me llevaban castigando dede hace muchos meses. Lamento no haber sido antes más valiente para dar el paso.
Supongo que si lo he dado ahora es porque te he conocido a tí, mi punto de apoyo. Mi compañera.
Me encanta que comprendas que no dejé la relación por tí, sino por mí.También hiciste lo mismo con él. Tienes la suerte de que él al principio lo pase mal, pero por momentos empieza a comprenderlo. Yo no puedo decir lo mismo.
Hemos pactado no cotarles lo nuestro. Enloquecerían y no exagero si habría un brote de agresividad por ambas partes.
Ahora ya empezamos a olvidarlo. Ya nos hemos desnudado, manteniendo una conversación larga y densa. 4 horas que todavía me dejan el cuerpo lleno de agujetas pero con un recuerdo placentero.
Si puedo hablar, me encanta hacerte disfrutar. Tu piel blanca, ese cuerpo diminuto y furioso a la vez, tu delicadeza para acariciarme, ese momento en el que gimes de placer....
Como siempre, mi obligación desde el primer día es tratarte bien. Muchos de los nuestros quieren saber qué vamos a hacer a partir de ahora. No lo sé, tiempo al tiempo. A disfrutar de mi nueva compañera. De momento tenemos muchas cosas en común y ninguna obligación. Así que entendería cualquier decisión que tomases en cualquier momento. Estoy listo.
Déjame que en este fin de semana Andalucía nos embruje. Quiero deshinibirme contigo. Lo sabes. Es natural.

sábado, 28 de abril de 2007

C'ést fini

Ella

Al final, las cosas inevitables acaban pasando, por mucho que duelan y por muchas lágrimas que supongan. Demasiado tiempo llevábamos tirando del carro, demasiadas broncas y demasiadas ilusiones en el tintero. Tanto que, al final, el vaso se desborda. Y eso es irremediable. No lograba hacerle comprender por qué me iba, no lograba que él entendiera, pero tampoco lo culpo... es normal que no lo entienda si siente tanto por mí. A veces desearía que me odiara, como él dice, para que no sufriera, porque al verle sufrir de ese modo yo me encuentro peor. Esto, supongo, también es inevitable. Esta mañana me encontraba rara, como en un sueño, sin saber muy bien como actuar ni qué hacer ni qué decir. Entonces he empezado a telefonear a mi gente, aquellos que ya sabían que esto iba a pasar tarde o temprano. Y me he sorprendido al ver como la inmensa mayoría de esta gente acababa de terminar una relación, o iba a terminarla, o quería terminarla y no podía. Pasa hasta en las mejores familias, todos los días, pero hoy me ha impresionado la cantidad de gente de mi entorno que está igual que yo. En cierto modo, me puedo sentir afortunada por tenerte, porque eres un apoyo increiblemente importante. De hecho eres la chispa que ha encendido esto, y créeme cuando digo que hacía falta. Tú también estás en esta situación, y yo también estoy ahí para cuando te sientas bajo, eso lo sabes. Hoy es un día triste, pero en cambio se abre por delante un gran mundo de posibilidades.

jueves, 26 de abril de 2007

Lo saben en casa

Él

Si no lo contaba a mi madre, reviento. Acabé por hablar de nuestra historia esta mañana. Llegar a las tantas de la madrugada a casa era de esperar que fuera suficiente motivo para levantar muchas sospechas:

- "Estarás haciendo algo malo. ¿Quieres que se lo cuente?"

- "Pues no. Solo te pido que cuando ella venga a casa no cuentes nada"

Con esa discusión acalorada me he marchado pensando en qué pasaría si lo hiciera. Luego entré en sensatez y decidí contárle nuestra historia. Sabía que se escandalizaría.Mi madre solo me ha pedido que tome una decisión. Quizás ande presionado, angustiado como si tuviera una bomba de relojería pegada al cuerpo. Puede estallar en cualquier momento, pero no sé cuando. Y eso es muy duro.
Es una incertidumbre que me entristece porque me doy cuenta que no es fácil dar el paso con o sin tí. O pidiendo tiempo para los dos, hasta que te encuentro frente a mí y se me quitan los pensamientos.
Luego vuelvo a mi realidad. A esa en la que tengo que fingir. Poco a poco lo saben mis amigos. Se sorprenden, me piden prudencia y tacto, mucho tacto. No quiero hacerle daño a ninguna de los dos.
Estoy es viviendo una etapa feliz, pero también complicada. ¿Quién me tiene que decir lo que va a pasar? Después de lo que nos ha pasado, puede suceder cualquier cosa.
Tenemos una doble vida. Contigo. Con ella. ¿Sin las dos? Imposible. Estoy preparado.
No me importa quedarme solo. No tengo miedo.

miércoles, 25 de abril de 2007

El revuelo de la primavera

Ella

Ayer fue un día grande. Te lo dije, espartano. Sí, cansancio en el trabajo, como siempre, pero sabes que compensa cuando haces lo que te gusta. En vaya embrollo nos metimos al decir que ésto nos gustaba... en fin.
Menos mal que tenía nuestra noche para disfrutar también, la guinda del pastel del día. Me induces a la vida sana, y eso está bien; la verdad es que me sorprendo a mí misma en este sentido. Que bueno es poder ser como somos delante de la gente que quiere que lo seamos, aunque aún no se lo crean, como me dicen, o aunque aún no lo acaben de aprobar. Es normal, y no me importa demasiado. Es nuestra historia y nosotros llevamos el ritmo, aunque siempre hay alguna frase que te hace pensar de más. Repito, no importa: sólo tú y yo sabemos hacia donde deriva y cuando llegan los momentos. Parezco la Cenicienta al esperar las doce.. o un poquito más, pero no importa pues siempre acabas llegando. Nos hace falta un hueco escondido para dar rienda suelta a todo lo que llevamos comido estos días. Te pondría un piso, y no de esos de 30 metros cuadrados que anuncia la ministra... Debe ser la primavera, las feromonas se ponen su traje de espartano (por seguir con los 300) y salen a batallar. Menuda...

Espartano

Él

Acabé el día asqueado de tanta batalla. El negocio de nuestra Esparta, encargarme de adoctrinar a mis soldados, los recados de la madre, preparar la estrategia en las Termópilas, y entre tanto estrés como Rey llega un mensajero para recordarme que me esperas a mi vuelta.
Te prometí que a mi regreso vendría intacto.Salvo la herida profunda en mi torso, aquella que me ha recordado al apuñalamiento que sufrí hace 6 años.
Este Leónidas se alivió de sanar su herida de guerra con su reina. Lo tenemos todo: cuádriga, un palacio, un imperio que expandir,soldados fieles a nuestra causa.
Fue un día de película. Déjame fantasear hoy con estas líneas. Vale que solo me entiendas tú.

martes, 24 de abril de 2007

Días de sol

Ella

Hoy el día se presenta largo, ya sabes que la vuelta al trabajo nunca es fácil.
Por fortuna, puedo decir que ayer fue un día grande.
Mucho.
Me diste 12 horas estupendas, llenas de mar y viento.
Escalar hasta la torre de vigilancia se presentaba difícil,
aunque al final fue mucho más fácil de lo que aparentaba, como todo.
Lástima que el cielo empezase a soplar con furia porque realmente
estábamos cómodos allá, con todo nuestro Mediterráneo a los pies.
Después me llevaste al centro comercial, y me sorprendiste al adivinar
qué prendas de ropa me gustaban y cuáles no. Muy buen ojo, si señor.
Más tarde una comida decente, con su ensalada depurativa y todo
y después un par de tés, el tuyo de samurais, y el mío de canela.
Afrodisiaco, como decías, aunque no me hace falta mucho estimulante que digamos...
Dijiste que me veías 'gandula' para recorrerme el paseo marítimo, pero lo conseguí...
no me achanto con facilidad, y menos con unas vistas así de bonitas.
Hicimos fotos, muchas fotos. Y logré sacarte, según tú, la mejor que te han hecho.
Sabes que lo logro porque te miro con los mejores ojos que puedo.
Y no me es difícil.
Al final se nos echó el tiempo encima y muchos compromisos se acabaron
quedando en el tintero, tanto para tí como para mí.
¿Y qué? Que me quiten lo 'bailao', como dirían algunos que conozco.
También tuviste algo de tiempo para mí por la noche, y eso se agradece,
sin duda. Pensé que ya era suficiente todo nuestro día, aunque aún me quedase
con ganas de un poquito más. También está bien "echarte de menos" en la medida
de lo posible. Está bien verte con ganas, como siempre que nos vemos.
Está todo muy bien, tanto como lo estoy yo.

Escondidos

Él

El Domingo te hiciste de rogar. Hasta la 1:30 no te escapaste de su piso.Pero en media hora pude distraer mi impaciencia con "La Rosa de los Vientos". Me gustaría que este programa de misterios hiciera pronóstico sobre cómo iba a empezar y terminar la noche.
Yo conduzco el coche, pero me guías tú siempre. La primera parada es un local 24 horas donde venden armas ilegalmente. El mismo sitio donde el periodista Antonio Salas se reunía con proxenetas para investigar a un boxeador nigeriano acusado de trata de blancas.
Te encanta la cerveza. Yo caprichoso busco un Bacardi Breeze como alternativa, pero tu me atrapas con el ámbar en las escaleras del Palacio. Lo mejor es que después de acabar el litro tienes fuerzas para salir de marcha. ¿De dónde sacamos la energía?. Supongo que de las ganas por vernos en lo que queda de la noche. Pero quiero que estemos en el anónimato. Lo conseguimos en una discoteca de ambiente, donde ninguno de los nuestros puede imaginar encontrarnos allí.

- Viva el amor!!!!!!!!!!!

Es lo que nos grita un grupo de locas al ver que nos besamos como si se nos fuera la vida en ello. Mientras nos devoramos,yo levanto el pulgar y esbozo media sonrisa porque el proclamante amoroso no sabe de qué va esta historia. Si supiera......
Quizá Marylin Monroe podría darnos lecciones de amor, pero bastante ocupada estaba dando el show dentro del local.
Me siento por primera vez con los pies en el suelo. Sin importarme quién nos observe. Una seguridad que sólo fuera de la ciudad podemos sentir. Tanta entrega me provoca hacerte la pregunta:

- ¿Dónde quieres acabar la noche?
- Donde tú quieras

Los amigos de "La Rosa de los vientos" habrían acertado anunciando la Ley de Murphy: "Buscas un hotel en una noche de calentón y no hay habitaciones libres".
En 2 horas poco íbamos a disfrutar.Tampoco planificando coger una para mañana y acostarnos una y otra vez en tu día libre. Qué bueno fue disfrutar 12 horas contigo. Me llenó verte feliz un lunes, día difícil de la semana.

domingo, 22 de abril de 2007

No te saco...

Ella

Puff...No logro sacarte de mi cabeza,
ni siquiera un momento.
Ayer me pasé el día pensando en tí, en el viaje,
en la cena, en la fiesta, en la cama...
Tuve que cortarme para no llamarte al terminar de cenar,
hay que controlarse, no se puede ir de las manos...
aunque a veces pienso que ya se nos ha ido.
Me entran paranoias, y te veo en todos sitios..
con decirte que ayer "te vi"en el coche que venía
detrás mía al entrar en la ciudad... es una locura.
Me dices que respondes a los "te quiero" de una manera distinta,
yo sólo te diré que no respondo y miro hacia otro lado.
Que piensas en mí cuando te acuestas con ella,
yo también lo hago, y encima no lo disfruto, eso sí que me jode...
Tenía ganas de volver, corriendo, para intentar sacar
algún otro momento para verte, y aquí estoy, destrozada después
de la fiesta de anoche (que por cierto, genial todo) pero con ganas
de pegarme el segundo duchazo del día, ejercer unas horas de novia,
y tener después todo nuestro tiempo de noche, si es que es posible.
Él se va mañana, y me duele con locura desear que se vaya,
sobre todo después de muchas cosas que me dijo ayer.
No sé ni como mirarle a los ojos...
Se me está haciendo cuesta arriba.
Aunque a veces, escuchando algunas canciones, sonrío y pienso
que estoy jodidamente feliz. Aunque duela por ahí.
Hoy es un "hoy por ayer", sin ninguna duda.

sábado, 21 de abril de 2007

Qué sé yo

Él

¿Loca? Entonces ya somos dos porque son las 4:30 y quiero escribirte. Acaba de regresar y se me hace duro no llamarte. Más si sé que estás esta noche a solas en una habitación con él y no debo molestarte.
Es difícil esconder las ganas.
Ya no sé cómo llamar lo que tengo con ella.Me dijo te quiero y cuesta replicarle con la misma frase. Sí, lo hice pero no me siento muy lúcido porque realmente no puedo estar enamorado si tú y yo vivimos esta historia.
Tampoco sé si ahora llamarlo sexo o hacer el amor. Esta tarde nos acostamos y lo hacía pensando en tí. Cumpliendo un papel con el que no quiero encasillarme.
Confuso, miserable, fustrado.
Tienes razón, hay que hacerlo con pasión. La pena es que la he dado pensando en tí, lo que me aflige más aún.
¿Qué nos estamos haciendo?
Me faltan tantas cosas al día que solo las encuentro en tí. Da miedo,¿verdad?. Pues lo llevo genial.
Mañana por la tarde se la dedico a mis pequeños.
Quiero disfrutarte.

viernes, 20 de abril de 2007

Nuestras "medias" horas

Ella

Dirás que estoy loca por estar escribiendo a estas horas,
y razón no te falta...
Pensaba bajar para verte y darte un par de besos,
esos que te tenía reservados todo el día.
Y mira, al final me da el día.
Y lo curioso es que no me importa, a pesar de lo que tenga
que hacer mañana.
He llegado a un punto en que simplemente me dejo estar
cuando estoy bien.
Y fíjate, estoy bien cuando estoy contigo.
Y el tiempo siempre es muy corto y muy complicado de ajustar.
Pero de verdad, no me importa dormir menos
si eso significa estar un poco entre tus brazos.
El coche se nos queda pequeño,
aunque confío en que algún día le pongamos remedio.
O me vas a ver reventar, nene.
Me sobran ganas y me falta tiempo y espacio,
siempre con la misma historia...

Dirty

Él

Fue una noche sucia. Nuestros amigos sabían lo que hacíamos. Tantas visitas a ese salón oscuro levanta de sobra sospechas. Y encima bromeando con que estabamos en el tema. Tú lo dices con palabras sucias. Me gusta que hablemos de sexo, aunque yo prefiero callar y dejar que,sin prisas, te desnude y rinda cuentas contigo.
Anoche no evité levantar tu camiseta para mordisquear tus pechos. Con medida, a la par que acaricié despacio tu espalda y preguntaba qué es lo que más te lleva de viaje. Quiero hacer que te sientas bien.
Ambos somos personas fogosas, y eso me marca para despertarme esta mañana y preocuparme porque te buscaban en el trabajo.
Lo negarás, pero empiezo a conocerte. Cuando me sigues con tu coche a la misma velocidad, sin apartar temerariamente esa mirada morbosa que me atrapa.
Si me bajo en un semáforo en rojo para abrir tu puerta y besarte, me da igual que la gente se escandalice.
Hoy no tendremos hueco. Solo los minutos para darte la cartera que metiste en mi bolsillo y pensar a tu regreso. Te vas un fin de semana con él.
¿Cuántas locuras nos quedan por vivir? No me arrepiento de conocerte en esta etapa de mi vida.
Me alegro. Es inevitable.

Cuestión de prioridades

Ella

Acabo de colgarte y me llamabas preocupado
porque no daba señales de vida esta mañana en el trabajo.
Recuerdo la frase de una profesora de ESO que me decía
que, ante todo, mi vida era lo más importante, antes que los estudios,
antes que el trabajo... Que debía arreglar mi vida siempre antes
de preocuparme por cumplir obligaciones.
Arreglar, arreglar, no sé si estaré arreglando algo
que más bien creo que no.
Pero prefiero pegarme a tí como una lapa
hasta las 8 de la mañana
que quedarme con las ganas en la cama.
Hoy por hoy, son mis prioridades
y no me arrepiento.
Y encima siento que cada día se me va más la olla contigo...
pero me consuelo pensando que tú también andas loco, chico.

jueves, 19 de abril de 2007

Por la noche

Él

El único momento del día donde te puedo contemplar. Y tuvimos la suerte de que ayer las calles eran desiertos. Mejor, así te dedico sin miedo.
El puente iluminado, un paseo junto al río, y yo despertando tus miedos al bromear con lanzarte a esas aguas tan descuidadas por uno que empiezas a conocer.
¿Qué rutina te provocará tanto estrés?. No me importa. Aquí estoy yo para darte un descanso.
Si tus nervios los domino con mi mirada, no sabes lo que provoca la tuya. Misteriosa, morbosa, insinuadome que lo más placentero del día lo encuentro a tu lado.
Hoy he paseado por tu rincón de ego. No puedo arrancarme del pensamiento tu silueta, esa sonrisa, el humor, los momentos de silencio, esas pequeñas cosas que me aguardas con el tiempo y disfruto cad segundo que paso contigo. También estaba él, pero te llevas toda mi contemplació n. Creeme, no siento desconcierto porque tú y yo somos una historia aparte.
Es mi obligación: tratarte bien. Lástima que solo sea por la noche.

miércoles, 18 de abril de 2007

Y se me pasan las horas

Ella


...
hablando contigo de todo un poco, para no cansar.
No sé que ocurre que cuando empiezo a tener claras ciertas cosas
me apareces y me cambias. Y yo me dejo.
Me encanta abrazarte y sentir que me atrapas entera,
me encanta que me mires, anque me pongas nerviosa.
Con esos ojos como no voy a querer que me mires...
Hace mucho que no daba un paseo por la noche.
De hecho, no sé si alguna vez lo he dado...
pero me ha gustado, sin duda.
Es una de las cosas que hay que repetir.
Y seguir hablando, que se está en la gloria...

Filigrana

Él

Como la pulsera que llevabas ayer. Filigrana también las que tengo que hacer para verte.
Anoche este futbolista no estaba para muchos regates y se quedó durmiendo con el Doctor House.
Y tú, con los borregos guiados por un lobo. ¿Acompañarte? No habría sido una noche perfecta, y más estando él a tu lado.
Hoy te he despertado por teléfono. Me sabe a poco. Envidio a tu gata, siempre ronroneando con el contacto de tu piel fina. Esa que muerdo con cuidado por temor a arrancártela de cuajo.
Me pediría ser un perro. Lo siento por tu felino.
Queda menos para esa semana de ausencia. Aprovechemos las madrugadas.

martes, 17 de abril de 2007

Los dias se me hacen cortos

Ella

Acabo de llegar a casa.
De celebrar algo que en todo el día no ha pasado por mi cabeza.
Soy más vieja, pero no por ello más sabia...
Esperaba que vinieras pero entiendo que no lo hicieses.
Yo no sé si iría...
De todos modos, en poco vuelvo a estar sola.
Sí, son muchas las dudas.
Pero también las ganas...
Me voy a dormir, mañana tocan altos cargos...

En segunda línea

Él

Es lo que toca ocupar a los dos. No tengas miedo porque yo te acompaño en ese lío. Tú bien con él, yo mal con ella. Mañana puede ser al revés.
El ansia por arrebatarte de él no existe , y mi tranquilidad es lo único que te quiero transmitir. No nos hemos pedido que les abandonemos, ni tampoco tenems que pensar en el mañana.
Solo nos quedan los minutos a solas. Un restaurante, dentro del coche, la escalinata del Palacio, el portón de tu trabajo....... te compraba una isla desierta para no tener miedo a que nos vean.
Anoche vi como te subías con él a su piso. Antes de eso me besaste, arrinconandome en esa oscura cochera. Si ellos abrieran los ojos y vieran..........

lunes, 16 de abril de 2007

Me repito

Ella


Dije en una ocasión que nada ocurre porque sí.

Y son muchas las cosas que pueden ocurrir.
Muchas las reacciones que se pueden despertar...
No sé... se hacen raras muchas situacciones y
a veces no sé como reaccionar,

aunque supongo que es inevitable...
También dije en una ocasión (es que me repito mucho...)
que las cosas han de venir con calma.
Pero sí, en sí es una historia..

Con Filosofía

Él

No tenemos otra alternativa. Hablamos aquí porque si nuestras parejas descubren lo nuestro, nisiquiera nosotros sabremos cómo acabará esta relación.De momento, estamos condenados a ser clandestinos.Él contigo, ella conmigo. Nadie lo va a entender. Confuso, verdad?.No lo sé.Habrá que tomarlo con filosofía